Queridos amigos: la periodista alemana Petra Gerster, concedió una entrevista esta semana al Die Welt (publicada en el cuerpo de economía), ZDF-Frau Petra Gerster: "Männer fördern eben lieber Männer" = Los hombres sólo prefieren apoyar a los hombres.
Ella nos explica: "Crecí en una época en que, si una niña quería dar su opinión en el colegio, le respondían que era una niña insolente". ¡Y eso que nació el '55, no es del siglo 18 ó 19! "Gracias a Dios, mis papás me educaron contra la corriente y pronto la sociedad cambió abruptamente. Gracias a los '68, hoy tan denostados. A partir de entonces, incluso en los conservativos Gymnasien humanistas se comenzó a discutir. Pero a las pocas alumnas, que habían sido educadas para ser sumisas, no les resultaba fácilsuperar la timidez que se les había inculcado". Algunas amigas mías extranjeras hablan, con frecuencia, de la docilidad -sumisión- de la mujer alemana, calidad que ellos ven como característica femenina (lean el Knigge sobre la mujer y entenderán de dónde vienen estas ideas...). Gerster continúa: "Ese complejo de inferioridad femenina nos ha acompañado durante mucho tiempo".
Me gustaría aprovechar sus palabras para animar a los padres a asumir con optimismo la responsabilidad de esducar a los niños contra corriente, si es necesario. Una amiga española me hacía ver, hace años ya, que, en Alemania, los padres no tenían la suficiente confianza en sí mismos, ni en su capacidad de influir en los hijos. Yo creo que sí la tienen y prueba de ello es lo que nos cuenta la periodista de televisión. ¡No hay que renunciar a este deber-responsabilidad de educar anticipamente, aduciendo que no se puede contra la sociedad!
2 comentarios:
Totalmente de acuerdo contigo Marta, no hay que renunciar a ese deber-responsabilidad. Aquí en el colegio lo que yo veo son padres esclavos de sus hijos, cuya afán de darles "todo lo mejor" los ha llevado a crear verdaderos monstruos que actúan como el dicho "cria cuervos y te sacarán los ojos"
Hay que educarlos para que tengan confianza en sí mismos pero también respeto para los demás. Eso y muchas cosas más.
Abracitos. Hilda
Gracias querida Hilda!
Me quedo con tu frase: "Hay que educarlos para que tengan confianza en sí mismos pero también respeto para los demás"
un abrazo!
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